Viajes con propósito: Turismo y regeneración

Viajes con propósito: Turismo y regeneración 

En las últimas décadas, y para hacer frente a los impactos negativos inherentes a la industria turística, muchos destinos y prestadores buscaron refugiarse bajo el concepto del turismo sostenible, que apunta a mitigar y neutralizar estos impactos negativos de la actividad en el ambiente y en las comunidades en las que se desarrolla. Pero el problema de fondo radica en que las actividades humanas ya han ejercido tal presión sobre las funciones naturales de los ecosistemas que su capacidad de resiliencia y de sostener la vida está en riesgo. Por eso, como respuesta a la crisis climática y ecosistémica, en los últimos años ha comenzado a tomar fuerza el paradigma del turismo regenerativo: un movimiento que tiene como propósito fundamental la regeneración ambiental y social de los territorios desde un abordaje holístico y sistémico. Así, el turismo regenerativo propone crear experiencias turísticas transformadoras que activen conexiones profundas entre los visitantes, las comunidades receptoras y los ecosistemas, creando valor compartido y restaurando el capital natural y sociocultural. 

Turismo con impacto para regenerar los territorios 

La era post-pandemia debería ser una gran oportunidad (y quizás la única que nos quede) para profundizar la idea de que las actividades económicas que desarrollamos (entre ellas, el turismo) deben contribuir a la reparación y restauración de los ecosistemas naturales, preservando la biodiversidad y los servicios ecosistémicos que permiten, en definitiva, sostener la vida como la conocemos. El turismo, desde esta función restaurativa, debe impulsar economías regionales justas e inclusivas, y propender a la diversificación de actividades productivas con triple impacto (económico, social y ambiental). Además, debería apuntar a revitalizar la cultura e identidad local de las comunidades receptoras, y promover gobernanzas locales transparentes y participativas. Un turismo regenerativo se diseña en cooperación con los actores territoriales (y no desde la competencia y la monopolización), promoviendo a la participación económica de los sectores más vulnerables y las comunidades originarias, la soberanía alimentaria, e invirtiendo en sistemas autosuficientes en materia de energía, alimentación y agua, apostando a una actividad libre de residuos donde, al igual que en la naturaleza, todo se transforme. En suma, que el criterio de éxito se mida en la reproducción de la naturaleza y en la mejora de la calidad de vida de las comunidades locales. 

Margay: Reserva Natural y Lodge de Selva 

La Ciudad Posible viene trabajando junto a la reserva Margay desde 2018, gestionando recursos para impulsar los proyectos regionales de regeneración con impacto social y ambiental. 

La Reserva Natural Margay es un espacio protegido de gestión privada, inmerso en la región de los Saltos del Moconá y en el área de amortiguación de la Reserva de Biósfera Yabotí, que preserva 260.000 hectáreas del último relicto de Selva Paranaense del planeta, en el Corredor Verde de la provincia de Misiones. 

La Selva Paranaense es el ecosistema más biodiverso de Argentina, y pertenece al Bosque Atlántico, el bosque de mayor biodiversidad del continente después del Amazonas, pero sobre el cual en los últimos 100 años se ha degradado más del 92% de su superficie original, como consecuencia del crecimiento exponencial de la actividades extractivas, como la industria maderera, papelera, el avance de la frontera agraria, de las urbanizaciones y del turismo asociado a sus atractivos naturales. 

La Selva Misionera es hogar también de las comunidades Mbyá Guaraníes y de colonias de productores rurales que se encuentran en una constante situación de vulnerabilidad. Por eso, vamos repensando constantemente nuestro trabajo experimental en la reserva y diseñando nuevas estrategias de turismo regenerativo que contribuyan a restaurar el ecosistema, y activar economías regionales restaurativas y más resilientes. 

Margay alberga en sus 60 hectáreas un lodge ecológico en la ribera del arroyo Paraíso –con vistas a la Reserva de Biósfera Yabotí–, que tiene como propósito ofrecer experiencias de turismo regenerativo a los visitantes, y funciona como un semillero de proyectos para restaurar la biodiversidad en uno de los ecosistemas más importantes del planeta. Dentro de la reserva, conviven Kawsay, un vivero de producción de especies nativas para proyectos de restauración; Refaunar, un proyecto de cría y reintroducción de especies nativas como la paca y el agutí; y Camuatí, una agrofloresta para producir alimentos restaurando el bosque nativo, que busca construir capacidades para las comunidades locales en actividades productivas sostenibles y regenerativas. 

Quienes nos visitan pueden vivir experiencias transformadoras en las cuales pueden volver a conectar profundamente con la naturaleza, consigo mismos y con los demás, y participar activamente como protagonistas del cambio en los proyectos de regeneración. 

Producción más limpia y valor compartido 

El punto de partida de la guía de buenas prácticas ambientales del lodge está basado en el Estándar NEPCon de turismo sostenible para servicios de alojamiento. 

Generamos nuestra propia energía de fuentes renovables –como el sol y la biomasa forestal para calentamiento de agua– y medimos la energía que consumimos. Somos “cero residuos”, ya que reciclamos y compostamos, pero además tenemos una política de consumo responsable y carbono neutro e invitamos a nuestros visitantes a compensar la huella ecológica de su viaje. Cuidamos el agua, protegiendo nuestras vertientes naturales que son nuestro mayor capital natural –el origen de la vida en este lugar. Estamos trabajando para dotar de filtros biológicos y biodigestores a todas las instalaciones. Conocemos nuestra capacidad de carga, que es limitada y se adapta a la biocapacidad del lugar. Aseguramos así que la productividad, adaptabilidad y capacidad de regeneración natural de la selva continúe sin interferencias. 

La vocación de RNM es crear valor compartido con las comunidades locales, articular con organización públicas, privadas y el sector científico tecnológico, que tienen mucho para aportar al modelo de desarrollo regenerativo que se quiere impulsar. En este sentido, la política de compras responsables del complejo turístico y la estación biológica refuerza el vínculo con las chacras de los productores locales que aportan la mayor parte de los insumos orgánicos para la gastronomía del emprendimiento. A su vez, en la boutique del lodge se comercializan productos regionales, artesanales e identitarios, elaborados por las comunidades guaraníes y las familias de productores. Instituciones como la Fundación Hábitat y Desarrollo, el Club de Roma y La Ciudad Posible colaboran gestionando recursos para impulsar los proyectos regionales de regeneración con impacto social y ambiental.



Junto a la Fundación Hábitat y Desarrollo, se desarrolló un relevamiento de vegetación vascular y atributos florísticos de alto valor de conservación, del cual surgió que la reserva cuenta con zonas de selva primaria, selva marginal y humedales interiores, y se destacan en su interior bosques protectores de pendientes, cursos de agua y vertientes, áreas con alto valor escénico y especies con alto valor de conservación. Dentro de la reserva se ha determinado una riqueza de más de 350 especies de plantas vasculares nativas. Se han identificado 43 especies con alto valor de conservación, incluyendo especies amenazadas según CITES y UICN, entre las que se encuentran especies en peligro crítico, como el palo amargo (Picrasma crenata); varias especies raras o poco frecuentes; y poblaciones de especies protegidas por la legislación provincial, como los helechos arborescentes. Margay forma parte de la Red Hábitat de Reservas y de la Red Argentina de Reservas Naturales Privadas. 

Refaunar: Una experiencia para proteger, rescatar y reintroducir fauna nativa en la Patagonia 

Refaunar es un programa de conservación que impulsamos desde la Fundación Club de Roma Argentina y La Ciudad Posible, en articulación con organizaciones locales y la Municipalidad de Puerto Madryn, que tiene como propósito preservar la vida silvestre y contribuir a refaunar - volver a poblar con especies nativas - las áreas naturales de Puerto Madryn y la región. 

La vida silvestre en la Patagonia argentina es un testimonio vivo de la belleza y la fragilidad de nuestro planeta.Cada año, más de 2.000 ballenas francas, 600.000 pingüinos de Magallanes y miles de lobos marinos, toninas y aves marinas arriban a estas costas como parte de sus ciclos migratorios. Tierra adentro, la estepa y el monte refugian a guanacos, pumas, zorros, aves, reptiles y roedores, que vuelven a las vastas extensiones de las mesetas patagónicas un lugar maravilloso. 

Este espectáculo natural de vida silvestre en libertad es uno de los motores más importantes de la economía regional, y más de 4.000 familias dependen directamente de esta industria en Puerto Madryn. 

Sin embargo, la expansión de las fronteras urbanas y productivas, la caza ilícita, la contaminación de los océanos, la degradación de sus hábitats y el mascotismo generan grandes riesgos para la supervivencia de muchas especies en peligro de extinción y están provocando la defaunación de las áreas naturales de la Patagonia. 

Desde Refaunar, prevenimos amenazas o riesgos sobre la fauna nativa, rescatamos fauna nativa vulnerable o en riesgo por causas humanas, y reintroducimos a los animales rescatados y rehabilitados en áreas naturales. 

El programa tiene, además, un rol fundamental en la sensibilización de la comunidad para que la ciudadanía pueda contribuir activamente en la protección de las especies nativas, y en la construcción de capacidades en las empresas e industrias, para que sus actividades generen el menor impacto posible sobre la fauna. 

Para los próximos dos años, el programa proyecta la construcción del primer Centro de rescate y reintroducción de fauna nativa de este sector de la Patagonia, para posibilitar tareas de investigación, programas de conservación y reproducción ex situ, y actividades de rehabilitación de ejemplares rescatados para su posterior liberación en su hábitat natural.

Para sostener las tareas de prevención, rescate y reintroducción, así como para construir el centro, se necesitan recursos y redes de colaboración. 

En este sentido, el turismo, que es una de las principales actividades económicas de la región, es una oportunidad para contribuir con la conservación. Por eso, estamos diseñando una experiencia para vivir el espectáculo natural más maravilloso de Argentina y ayudar a proteger la vida silvestre. La experiencia pondrá el foco en el avistaje respetuoso de fauna, la fotografía de naturaleza, la aventura y la participación en las actividades de conservación. Para conocer más sobre Refaunar Patagonia, seguinos en instagram @refaunar y visitá nuestra web www.refaunar.org 

Sobre La Ciudad Posible 

Somos un ecosistema multidisciplinario de profesionales que trabajamos con el propósito de regenerar recursos para garantizar la sostenibilidad en los territorios. Nuestra misión es facilitar y movilizar procesos de regeneración urbana y territorial, acelerar e incubar emprendimientos de triple impacto, e inspirar y construir capacidades locales para la transición en América Latina. 

Como parte de nuestras acciones en el marco del #DesarrolloEcosistémico, creemos en el turismo activo y regenerativo como motor para el desarrollo territorial sostenible. Incubamos emprendimientos de turismo regenerativo, acompañamos la planificación del desarrollo turístico regenerativo en ciudades y regiones, diseñamos planes de acción turístico y experiencias de turismo regenerativo, y desarrollamos capacitaciones en diferentes ámbitos. 

Para conocer más sobre nosotros, ingresá a www.laciudadposible.net

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